¿Qué es la Convención de Viena de 1988?

La Convención de Viena de 1988 es un tratado internacional que fue adoptado en la ciudad de Viena, Austria, el 28 de abril de 1988. Este tratado tiene como objetivo principal establecer un marco legal para la venta internacional de mercancías.

La Convención de Viena de 1988 es una modificación de la Convención de Viena sobre la venta internacional de mercancías de 1980. Fue creada con el fin de armonizar y unificar las reglas de derecho aplicables a las transacciones internacionales, facilitando así el comercio entre los diferentes países.

En la Convención de Viena de 1988 se establecen normas sobre la formación del contrato de venta, los derechos y obligaciones de las partes, la entrega de las mercancías, la transferencia de riesgos y otros aspectos relacionados con el comercio internacional. Además, esta Convención tiene aplicabilidad a nivel internacional, ya que hasta la fecha ha sido ratificada por más de 90 países.

Es importante destacar que la Convención de Viena de 1988 establece una serie de principios fundamentales que rigen las transacciones comerciales internacionales. Entre ellos se encuentran la buena fe, la libertad de forma y la interpretación uniforme del contrato, entre otros. Estos principios contribuyen a la seguridad jurídica en las transacciones internacionales y fortalecen la confianza entre los comerciantes de diferentes países.

En conclusión, la Convención de Viena de 1988 es un tratado internacional que regula la venta internacional de mercancías, estableciendo un marco legal para las transacciones comerciales entre países. Su objetivo principal es unificar las reglas aplicables al comercio internacional, promoviendo así la seguridad jurídica y facilitando el intercambio de bienes y servicios.

¿Cuántos países se encuentran suscritos en la Convención de Viena de 1988?

La Convención de Viena de 1988 es un tratado internacional sobre la compra-venta internacional de mercaderías. Fue adoptada en Viena, Austria, el 11 de abril de 1980 y entró en vigor el 1 de enero de 1988.

Esta Convención tiene como objetivo unificar el derecho internacional en materia de compraventa internacional de mercaderías, estableciendo reglas claras para los contratos de venta de bienes entre países. De esta manera, se busca promover y facilitar el comercio internacional y reducir los conflictos legales entre las partes involucradas.

Hasta la fecha, la Convención de Viena de 1988 cuenta con la suscripción de 93 países en todo el mundo. Estos países son partes contratantes del tratado y están obligados a cumplir con sus disposiciones y principios en sus relaciones comerciales internacionales.

Algunos de los países suscritos a la Convención de Viena de 1988 son: Argentina, Brasil, España, Francia, Italia, Japón, Reino Unido, Rusia, Estados Unidos, entre otros. A través de su adhesión a este tratado, estos países buscan fomentar la confianza y seguridad en sus transacciones comerciales internacionales.

La Convención de Viena de 1988 ha sido ampliamente aceptada en el ámbito internacional, lo que la hace una herramienta fundamental en el comercio internacional. Sin embargo, algunas naciones aún no han suscrito este tratado, lo que puede ocasionar ciertas complicaciones legales en las transacciones comerciales entre países que sí lo han hecho.

En conclusión, la Convención de Viena de 1988 es un tratado internacional que cuenta con la suscripción de 93 países en todo el mundo. A través de esta Convención, se busca unificar el derecho internacional en materia de compraventa internacional de mercaderías, promoviendo así el comercio internacional y reduciendo los conflictos legales entre las partes involucradas.